ENRIQUE IGLESIAS Y KOURNIKOVA LA LíAN: Fueron llamados al orden en un hotel por emitir "gritos de placer".
Menuda juerguecita se tuvieron que correr la tenista Anna Kournikova y el cantante Enrique Iglesias en la madrugada del sábado al domingo. Ayer se supo que el mismo domingo por la mañana, la recepción del hotel donde se hospedaban en Londres, el lujosísimo Four Seasons (la tenista participaba en Wimbledon y el domingo jugaba la final de dobles junto con Chanda Rubin ante las hermanas Williams y el cantante actuaba en un concierto en Hyde Park junto con otras estrellas) apareció llena de hojas de reclamaciones, quejándose del comportamiento de la pareja.
La pareja, que ya protagonizó un vídeo más que sensual para una canción del último disco del hijo de Julio Iglesias, apareció en el hotel sobre las 12:30 de la noche, una hora más que prudente para una deportista y para un artista con serios compromisos al día siguiente, salvo que llegaban de un conocido local de copas londinense, el Mayfair Club, sito en el West End de la capital británica, donde habían estado bebiendo cócteles de champagne.
Una vez en sus aposentos, la pareja empezó otra juerga. Así lo atestiguaba un testigo de la misma planta que la pareja: "Eran muy ruidosos. Incluso yo podía escuchar a Anna gritar. Eran gritos de placer más que otra cosa. Otro huésped llegó a golpear su puerta. Entonces se callaron y comenzaron a reírse. Al poco tiempo volvieron los gritos y algunos decidimos presentar una queja a la dirección del hotel, que finalmente decidió enviar a alguien para que viese lo que estaba sucediendo, algo que pasó a las cuatro de la mañana".
Horas después de su actuación, la pareja, tras jugar Anna su final de dobles donde fue vapuleada junto a su compañera Rubin por las hermanas Williams, se volvía a reunir en el backstage del concierto en el que participaba el cantante antes de regresar a Miami, donde habitualmente viven.
Q cabrones... :nut: